Las cuatro P del marketing

Para todo existe un ABC. Estos son los fundamentos básicos de cualquier disciplina y los cimientos de un rubro. En el marketing existieron incluso antes de la teoría y hoy forman parte de los libros y seminarios más importantes. Estas son las cuatro P. Si quieres incursionar en el mundo del marketing y sobre todo del marketing digital debes conocer cuáles son las cuatro P y cómo han evolucionado en el tiempo para convertirse en el ABC de tu propio negocio.   

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Remontándonos a 1960, un profesor de contabilidad en la Universidad de Michigan en Estados Unidos, conocido como E. Jerome McCarthy, introdujo cuatro elementos que serían vanguardia para construir el pensamiento teórico del marketing de manera integral. Se trata de las cuatro P (producto, precio, punto de venta y promoción) que buscan elaborar una estrategia que logre satisfacer los objetivos de una empresa y las necesidades de su audiencia. Aunque en su momento estos conceptos fueron duramente cuestionados, hoy son los cimientos de cualquier estrategia de marketing.

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¿Qué significan las cuatro P del marketing?

Ya te hemos adelantado que las cuatro P se refieren al producto, precio, su punto de venta y promoción. En el libro Basic Marketing, Jerome McCarthy desarrolló cada uno de estos elementos para condensarlos en un concepto llamado Marketing Mix, cuya intención era, justamente, definir lo que es el principio del marketing.

Producto

Según este profesor, un producto es “la oferta con la que una compañía satisface una necesidad”. Y no necesariamente se trata de un elemento tangible, sino que se le atribuye a todo aquello que, por sus atributos, es de interés para un tercero. Es decir, un producto que existe para propósitos comerciales. Entonces, a la hora de salir al mercado, debemos tener en cuenta primeramente qué o cuál es el producto que estoy comercializando y cuáles son las necesidades que puede satisfacer. Además, los beneficios que puede otorgar y qué es lo que lo hace diferente de mi competencia.  

Precio

Sería tan fácil como decir que es el valor monetario que le damos a nuestro producto. Y es cierto. Pero no incluye solamente esto, sino que también se tiene en cuenta un montón de otros aspectos: el valor que nuestros clientes le dan a nuestro producto, el valor que le da nuestra competencia, lo que estamos dispuestos a rebajar, la ganancia que debemos obtener. 

Para poder ponerle un valor monetario a nuestro producto debemos realizar una investigación exhaustiva. Debemos conocer cuánto cotiza en el mercado, cuánto invertimos para conseguirlo, cuánto están dispuestos a pagarlo, entre otras variables. Una vez obtenidos todos estos datos, deberás evaluar cuál es el valor monetario que puedes otorgarle para que compita dentro del mercado y que a su vez te de un margen de ganancia. 

Punto de venta 

¿Cómo llega nuestro producto hasta nuestro cliente? Este es un factor a considerar, mucho más en tiempos de pandemia donde todas las transacciones se hacen de manera online y el envío es uno de los puntos más fuertes a la hora de la toma de decisión de nuestro cliente. 

Ese es el punto de venta, aquel proceso que atraviesa nuestro producto hacia su destino final e implica distintos factores: el almacenamiento, transporte, costos y canales. Aquí deberás tener en cuenta cómo puedes simplificar estos procesos para hacerlos lo más accesible posible tanto para tu bolsillo como el de tus clientes y que el servicio sea rápido y efectivo para una grata experiencia del consumidor. 

Promoción

Acá entran en jugo las estrategias que deberás idear para darte a conocer. Hay un millón de posibilidades tanto para el mundo offline como para el mundo online. La publicidad es algo en lo que deberás invertir si quieres llegar a grandes audiencias e impactar dentro del mercado. Puede ser con una estrategia de redes sociales en conjunto con anuncios en Google y Facebook o publicidades en la vía pública. Todo es posible hoy en día. Sólo debes encontrar aquello que más se amolde a tí y, sobre todo, a tus clientes.  

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Lo que te recomendamos desde Wisd Global es diseñar una estrategia basada en el Inbound, es decir, en pensar en las necesidades de tus clientes antes que tus beneficios comerciales. Otorgar contenido que sea de preferencia, les otorgue un valor agregado y atienda sus inquietudes  De esta manera ganarás su confianza y optarán por elegirte a vos como referente del rubro. Estas estrategias son las más recomendadas ya que son amigables con el cliente quien, en definitiva, es nuestro actor más importante. 

Ten en cuenta a quiénes quieres llegar y dónde se encuentran para poder afinar tus campañas de promoción a aquellos sectores y no despilfarrar dinero en campañas que no tendrán éxito.

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Conclusión

Las cuatro P son elementos que existen incluso antes de haber sido puesto en palabras y hoy siguen persistiendo y evolucionando de la mano del marketing y las nuevas concepciones de él. Cuando decidas emprender en este mundo ten en cuenta estos términos para poder elaborar una estrategia integral camino al éxito. Recuerda que una estrategia debe responder a objetivos concretos pero siempre ten en cuenta las demandas de tu clientela, puesto que son éstos los que te van a garantizar el éxito o el fracaso. Procura crear una experiencia armónica entre estos elementos. ¿Quieres comenzar una estrategia y no sabes por dónde comenzar? completa el formulario y con un agente especializado de Wisd Global te ayudará

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